Y el blog cumple 6 años (con un poco de retraso)

Buenos días a todas, parece que no pero el blog ha cumplido ya 6 años. que se dicen pronto. Aunque este post llega con bastante retraso, la vida y la vuelta de septiembre me han absorbido y llevamos un mes que parece que nos ha mirado un tuerto, no salimos de una y nos metemos otra. ¡Qué complicada es la vida adulta!

Como siempre intento que este post sea una reflexión de este año, y es que ¡menudo año! ya el año pasado por estas fechas estaba en plena ebullición de un cambio de vida y con el comienzo del 2019 se hizo realidad, una mudanza que casi acaba con nosotros. Esa mudanza me hizo replantearme muchas cosas, sobre todo a nivel maquillistico y es que cuando empece a abrir cajones y ver todo lo que no usaba me agobié mucho. Tanto dinero y producto ahí metido, sin usarse, me daban los 7 males. Hice una purga enorme y me quedé casi con la mitad de lo que tenía. ¿Quién me iba a decir a mi que podría vivir con solo 5 coloretes? Pues sí, se puede y hasta es sano para la mente.

Mi nivel de compras de maquillaje se ha reducido mucho, ahora casi siempre compro cosas para reponer, y a veces ni eso, porque el nivel de acumulación al que llegué fue suficiente para 3 vidas por lo menos.

La siguiente foto es un resumen de los 'caprichos' que me he dado este año, no doy crédito de que no me he comprado ni un sólo labial en estos últimos meses.

Es cierto que con la mudanza y el organizar un nuevo hogar mi mente estaba más en Ikea que en Sephora o Primor, pero os aseguro que no lo he echado de menos. Y es que tantas novedades de golpe me agobian, hace unos meses salía como nueva la Naked Reloaded y ya está a la venta la Naked Honey, ¡Si todavía estoy encoña´con la primera!

Y aquí hago otra reflexión, ¿De verdad es necesario tanta producto de maquillaje, tanta paleta con 'nuevos tonos' y nuevas texturas? ¿De verdad necesitamos tantas novedades en nuestra vida? Cuando empiezas en este mundo todo te parece nuevo y maravilloso, todo lo que te venden lo quieres y todo lo usas, pero cuando te conoces más y sabes qué es lo que más usas, que tonos te favorecen y que texturas te gustan ya no sales de ahí, te quedas con tu kit y las novedades ya no te atraen de igual manera. Pues yo ahora estoy en ese punto. Adoro el maquillaje, la cosmética y el cuidarme día tras día, pero ya no salgo de mi zona de confort y estoy muy bien en ella. 


Ojo, no crítico a las personas que se gastan su dinero en lo que quieren, solo es una reflexión personal para que nos paremos a pensar si de verdad compramos porque queremos o porque nos dicen lo que queremos.



También quiero hablar de si los blog están muertos. Tengo que reconocer que como usuaria, mi nivel ha bajado mucho, me cuesta más entrar y leer, pararme con mi café delante del ordenador. Y es que es más fácil leer y escribir en una red social, que al fin y al cabo lo puedes hacer en cualquier momento del día. Requiere menos trabajo y menos tiempo y es que por desgracia muchas de nosotras no nos dedicamos en exclusiva al blog, tenemos vidas con sus problemas y sus distracciones. Tenemos asuntos importantes de los que ocuparnos y este hobby se queda relegado a una pequeña esquina del salón.

Aun así intento sacar un rato cada semana para darme una vuelta y descubrir la opinión de las personas de a pie que no están compradas. Ya sabéis que el mundo IG cada vez huele peor y es difícil creerte lo que te dicen.

Entonces, ¿seguiré con el blog? Pues sinceramente no lo sé, yo quiero seguir al pie del cañón pero las nuevas tecnologías nos dirigen por otros caminos, aún así espero seguiros viendo aunque la senda cambie de paisaje.


Gracias a las que seguís por aquí, y gracias por leer el tocho de texto que acabo de soltar, a veces no es fácil poner en orden todo los que nos ronda por la cabeza y que la gente lo entienda.

¡Hasta la próxima!